Las enfermedades crónicas son una de las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo. Estas afecciones suelen surgir en la edad adulta y entre ellas están la diabetes, la hipertensión arterial y el Alzheimer, entre otras muchas.
A menudo estas enfermedades aparecen de forma gradual por factores relacionados con el estilo de vida o el ambiente que nos rodea, por lo que en muchas ocasiones pueden prevenirse.
En este artículo de Seguros Atocha vamos a conocer todos los detalles de estas enfermedades, desde los factores de riesgo más comunes hasta los mejores consejos para intentar prevenirlas. Y, por supuesto, con una explicación previa sobre qué son y qué tipos son los más habituales.
Si quieres saber más información sobre este tema, ya sea porque tú o algún ser querido padecéis una o porque eres más de prevenir que de curar, te animamos a continuar leyendo este artículo.
QUÉ SON LAS ENFERMEDADES CRÓNICAS
Las enfermedades crónicas son enfermedades de larga duración y que, por lo general, van empeorando con el tiempo aunque suelen hacerlo de forma lenta. Para que pueda considerarse crónica el paciente debe llevar algunos meses padeciendo, según la fuente que se consulte pueden ser 3 o 6 meses.
Como se ha dicho, tiene un avance lento y por lo general no tiene cura, por lo que acompaña al enfermo durante toda su vida. Esto no quiere decir que sea la causa de muerte de los pacientes.
Aunque se comentarán más en detalle en el apartado siguiente, algunas de estas enfermedades son la artritis o el cáncer. Por lo que además de los factores ambientales o de estilo de vida, la genética también influye a la hora de padecerlas, o al menos de tener más probabilidades de hacerlo.
En cuanto al tratamiento de estas enfermedades, este depende del tipo de patología. Aunque sean enfermedades para toda la vida, existen distintos tratamientos y medicaciones que hacen que sus efectos afecten de menor forma a la calidad de vida de los pacientes que la padecen.
Algunos de estos tratamientos son, por ejemplo, radioterapia para los tumores, insulina para la diabetes o fisioterapia y medicamentos antiinflamatorios para la artritis.
CUÁLES SON LAS ENFERMEDADES CRÓNICAS MÁS COMUNES
Aunque ya se han mencionado algunas enfermedades de larga duración en los párrafos anteriores, a continuación se van a enumerar algunas de las más comunes junto a una breve descripción.
Asma
El asma es una enfermedad que provoca dificultades a la hora de respirar, ya que hace que las vías respiratorias se hinchen. Un ataque de asma ocurre cuando el recubrimiento de las vías se inflaman y los músculos que la rodean se estrechan, reduciendo la cantidad de aire que puede pasar por ellas.
Alzheimer
Se trata de la forma más común de demencia y afecta a la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Por norma general su aparición es tardía, suele darse en personas mayores de 60 años.
Diabetes
La definición más breve es que el cuerpo de los pacientes con diabetes no puede regular la cantidad de azúcar en sangre. Ya sea porque produce poca insulina o porque pone resistencia a la acción de esta hormona. También puede darse la combinación de ambas.
Cáncer
Esta enfermedad se origina en las células, cuando el material genético de una célula cambia y empiezan a crecer de manera descontrolada células anormales en el cuerpo. Existen muchos tipos de cáncer y pueden aparecer en casi cualquier órgano o tejido de nuestro cuerpo.
Endometriosis
Afección en la cual un tejido parecido al que se encuentra en la mucosa interior del útero aparece en la parte exterior, ocasionando una reacción inflamatoria crónica en distintas partes del cuerpo. Esta enfermedad puede aparecer desde la primera menstruación hasta la llegada de la menopausia.
Parkinson
Enfermedad que afecta al sistema nervioso y provoca movimientos involuntarios o incontrolables. Esto se debe a que las células del cerebro que ayudan a controlar el movimiento y la coordinación mueran lentamente.
Cardiopatía coronaria
Tipo de enfermedad cardiaca en la que los vasos sanguíneos se estrechan y no pueden llevar suficiente sangre rica en oxígeno al corazón. Su causa depende del tipo de cardiopatía, pero suele deberse al colesterol.
FACTORES QUE AUMENTAN EL RIESGO DE SUFRIR UNA ENFERMEDAD CRÓNICA
Existen algunas causas o elementos que hacen que padecer una enfermedad de larga duración sea más probable.
- Estilo de vida. En esta categoría entraría la mala alimentación, el consumo abusivo de alcohol, el hábito de fumar o el sedentarismo.
- Factores ambientales. La contaminación del aire, la exposición a la luz o el clima son algunos de los factores ambientales que pueden aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad de este tipo.
- Genética. Algunas de estas afecciones tienen un componente genético, es decir, se originan por una alteración de un gen. Además, algunas de las enfermedades genéticas son también hereditarias.
CÓMO PREVENIR UNA ENFERMEDAD CRÓNICA
Prevenir este tipo de enfermedades puede ser muy sencillo con ayuda de algunas medidas, sobre todo las relacionadas con el primer factor de riesgo que hemos comentado: el estilo de vida. Estas medidas pueden ser:
- Seguir una dieta saludable y equilibrada. Una dieta variada, rica en frutas y verduras y baja en grasas saturadas y azúcares, puede ayudar a evitar enfermedades crónicas así como enfermedades relacionadas con el peso que pueden acompañarte durante toda tu vida como la obesidad.
- Limitar el consumo de alcohol. No es necesario que dejes de tomar bebidas alcohólicas, pero sí que se debe hacer un uso moderado de estas. Así evitarás enfermedades hepáticas o cardiovasculares, entre otras.
- Practicar actividad física de manera regular. Dejar de lado el sedentarismo y tener una vida activa aleja las posibilidades de sufrir enfermedades cardíacas y diabetes.
- No fumar. El tabaquismo es una de las principales causas de afecciones como el cáncer o las enfermedades respiratorias.
Otra manera de prevenir estas enfermedades, o de conseguir tratarlas de forma temprana para aminorar los efectos negativos que puedan tener en ti y en tu calidad de vida, es con revisiones médicas anuales o pruebas específicas.
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