Dentro de las ceremonias funerarias hay términos que a menudo se confunden o se usan como si fuesen lo mismo. Entender bien la diferencia entre velatorio y funeral, así como el papel que juega el tanatorio en todo este proceso, ayuda a transitar el duelo con mayor claridad.
Más allá del lenguaje, conocer con precisión qué ocurre en cada etapa del adiós permite tomar decisiones más conscientes y aliviar parte de la carga emocional y organizativa.
En este artículo explicamos las diferencias entre velatorio, tanatorio y funeral, y cómo un seguro de decesos puede acompañar a las familias con un servicio integral, accesible y humano.
¿QUÉ ES UN VELATORIO?
El velatorio es el momento en el que la familia, amistades y personas cercanas se reúnen para acompañar al difunto antes de su entierro o cremación. Es una etapa íntima que permite empezar a asimilar la pérdida y dar espacio a la primera despedida.
Este encuentro se realiza normalmente en las salas de velatorio, que pueden encontrarse dentro de los tanatorios, en el domicilio familiar o en otros espacios habilitados.
Durante el velatorio, cada persona se despide a su manera: compartiendo recuerdos, acompañando en silencio, rezando o simplemente estando allí. La función principal no es ceremonial, sino humana; se trata de permitir que el duelo comience con apoyo, compañía y afecto.
Aunque es un momento duro, muchas familias valoran especialmente esta fase. Por eso, contar con un servicio funerario que cuide cada detalle, desde el espacio hasta el ambiente, puede marcar una gran diferencia.
¿QUÉ ES UN TANATORIO?
El tanatorio es el espacio físico donde habitualmente se lleva a cabo el velatorio. A diferencia del funeral, que es una ceremonia, y del velatorio, que es un momento de reunión íntima, el tanatorio es el lugar que acoge y facilita ese encuentro.
Estos centros suelen estar equipados con varias salas de velatorio, zonas comunes, cafetería, servicios auxiliares e incluso capilla para quien desee realizar una ceremonia religiosa o un acto simbólico. La función del tanatorio es proporcionar un entorno cómodo, accesible y respetuoso para la familia del difunto y sus acompañantes durante esas primeras horas de duelo.
Hoy en día, los tanatorios han evolucionado mucho. Algunos incluso ofrecen apoyo psicológico y asesoramiento legal, o servicios para acompañar el acto como música en directo. Los seguros de decesos cubren tanto el uso de estas instalaciones como los servicios necesarios, y permiten incluir prestaciones adicionales para que la despedida se adapte a los deseos de cada familia, como ocurre con la Prima Bienestar.
¿QUÉ ES UN FUNERAL?
Por último, el funeral es la ceremonia de despedida que se celebra tras el velatorio y antes del entierro o la cremación. A diferencia del velatorio, que es íntimo y flexible en cuanto a forma y duración, el funeral suele tener una estructura más definida y un significado simbólico profundo.
Existen distintos tipos de funerales, dependiendo de las creencias de la familia. Puede tratarse de una ceremonia religiosa, como una misa en memoria del difunto, o de un acto laico, y se celebra normalmente en una capilla, un lugar de culto o el propio tanatorio.
En este momento se recuerda la vida del ser querido, se pronuncian palabras de homenaje y, muchas veces, se acompaña de flores, coronas y ramos como muestra de afecto.
El funeral marca el final del proceso público de despedida. Aunque cada familia lo vive de forma distinta, es habitual que asistan tanto los más cercanos como conocidos o amigos del difunto, ya que representa un gesto de respeto hacia quien se ha ido.
EL PAPEL DEL SEGURO DE DECESOS
Comprender qué es un velatorio, un tanatorio y un funeral no solo aclara el lenguaje, también alivia parte del peso emocional que supone organizar una despedida. Cada uno cumple una función específica dentro del proceso de duelo, y conocerlas permite a las familias actuar con mayor calma, sin prisas ni dudas.
En un momento tan delicado, contar con un seguro de decesos no es solo una cuestión de organización: es una forma de cuidar a quienes más queremos cuando ya no estemos. Además del acompañamiento emocional y práctico, este tipo de seguros también supone un importante alivio económico, ya que cubre los principales gastos funerarios y evita imprevistos a la familia.
La Prima Bienestar de Seguros Atocha, por ejemplo, incluye un servicio completo y personalizado que abarca desde la gestión del tanatorio hasta la organización de la ceremonia, con atención profesional, cercana y sin complicaciones para la familia.
Porque una despedida también puede ser serena si se cuenta con el apoyo adecuado. Y entender estas diferencias es el primer paso para que así sea.
